febrero 02, 2017
El arte de dar masajes es tan antiguo como el propio mundo. No debemos olvidar “hablar a la piel de los bebés” tal como expresó Frédédick Leboyer en su obra “ SHANTALA. Un arte tradicional: El masaje de los niños”.
Los masejes en el aula de bebés son una actividad imprescindible. Supone una excelente vía para mejorar y afianzar el vinculo afectivo positivo : el apego, entre el educacor/a y el niño/a.
Además de favorecer el conocimiento y diferenciación de las partes de su cuerpo , mejora el desarrollo psicomotor y muscular y por supuesto satisface la necesidad de contacto corporal que tiene el niño. A través de los movimientos de nuestras manos, de nuestros gestos y nuestras caricias le estamos diciendo al bebé: eres importante para mi.